Armand Toussaint

Armand Toussaint

 


Nacido el 28 de Enero de 1895 en Bélgica, Armand Toussaint fue un discreto y multifacético maestro que ha marcado casi desde la sombra al esoterismo iniciático moderno. Surgido de las aulas del Athénée Royal Vauban de Charleroi donde se licencio, entró a trabajar como inspector en la Sociedad Nacional de los Ferrocarriles Belgas (SNCB), cargo que ocupó durante gran parte de su vida y que le permitirá viajar grandes distancias, allanando su actividad iniciática y ocultándola a los ojos profanos.

Sus escarceos con el ambiente esotérico comenzarán desde muy joven, involucrándose en el cultivo de múltiples vías en paralelo. Es así que desde 1933 hasta 1970 es presidente de la Fraternidad Rosacruz de Max Heindel, de la que se separa por el exceso de dogmatismo y la pérdida de la espiritualidad que se impulsaba desde la sede central, fundando su propia escisión en 1971.

En 1946, Toussaint comenzará el estudio de la Alquimia, de la que con el tiempo, alcanzará precisos conocimientos que demostrará en su edición comentada del Cantar de los Cantares, hablando sobre la Alquimia interior del Cuerpo de Gloria. Sin embargo, reconoce que no ha experimentado ninguna realización práctica en esta vía, hasta trabar amistad en 1971 con Roger Caro. Esta relación lo introducirá en los conocimientos de los Frères Aînés de la Rose+Croix y le permitirá consumarse como un destacado especialista en esta vía, incluso en 1992 creará una logia hermética dentro de la O.·.M.·.C.·.C.·. 

La Église Gnostique Apostolique será otra de las vías que Armand Toussaint cultivará. Siendo consagrado como Obispo libre en 1963 bajo el nombre de Tau Raymond Panaghion por Roger Deschamps, permanecerá en la jerarquía eclesiástica hasta 1969, cuando su propuesta de “[…] abolir toda discriminación por razón de sexo en las ordenaciones y, en consecuencia, admitir a las mujeres, con todas las otras condiciones necesarias cumplidas, a los grados mayores de Presbítero y hasta de Obispo.” no fue aceptada por sus pares. Ante esta situación decide retirarse para fundar la Iglesia Rosacruz Apostólica, institución abierta a todos los géneros y que aún permanece activa en varios países.

Toda esta experiencia iniciática en el marco de diferentes vías, será vital para la concreción de lo que a partir de 1971 se conocería como la O.·.M.·.C.·.C.·., novedosa estructura en la que Toussaint cristalizaría para el martinismo, una forma de organizarse más flexible y permeable, indudable fruto de su experiencia de toda un vida de recorrer múltipes sendas.

Habiendo sido iniciado en 1930 en el martinismo ruso por Serge Marcotoune, uno de los maestros de la línea rusa más respetados, y alcanzado el grado de Superior Incógnito Iniciador (S:::I:::I:::), Armand Toussaint crea en 1971 la Orden Martinista de los Caballeros de Cristo luego de que su maestro le pidiese que fundase una logia en Bélgica. Esta estructura resulta ser única en su tipo, siendo depositaria de la línea rusa de Serge Marcotoune, de la filiación francesa de Papus, del martinismo ruso de Robert Ambelain y de la tradición caballerezca, adoptó una organización interna que impulsó el transvase de las tres filiaciones del martinismo a todos los miembros de la orden, independientemente de en cuál de las tres hayan sido iniciados. A su vez permitió que los S:::I:::I::: fuesen libres de transmitir el grado de consagrador sin el aval de la jerarquía de su Orden y de enseñar e investigar el martinismo sin limitaciones. De esta manera, la Vía Cardíaca se enriqueció con múltiples aportes surgidos a la luz de diversas vertientes pertenecientes a una misma corriente espiritual martinista y se impidió el estancamiento propio de la estructura de las grandes órdenes, donde se tiende a privilegiar las cuestiones administrativas en desmedro de las espirituales.

Los beneficios que trajo el esquema organizativo que introdujo Armand Toussaint fueron evidentes al promediar los años 80’s, donde los Caballeros Martinistas de Cristo comenzaron a convivir con adeptos alquimistas (Los llamados Caballeros de las Logias Verdes) y teúrgos externos (Pertenecientes a la despierta Orden de los Caballeros Masones Élus Cohen del Universo) sin perder su propia identidad de Hombres de Deseo cultivadores del teurgismo cardíaco de Louis-Claude de Saint-Martin. El propio Toussaint se alejó rápidamente de los Elus Cohen, por considerarla  una vía de operaciones demasiado complejas e ineficaces. Sin embargo, fiel a la libertad que impulsó en el martinismo, jamás se opuso la vinculación de las logias verdes con los Elus Cohens de aquellos años.

La libertad y la adaptabilidad de la que gozan los grupos martinistas en la O.·.M.·.C.·.C.·. se basa en darle prioridad a la trasmisión de maestro a discípulo, sin abandonar los esquemas de grados establecidos por el martinismo moderno. Pero esta libertad, no se transformó en sincretismo, porque Toussaint recibió y legó a la O.·.M.·.C.·.C.·. las principales corrientes martinistas. Así, aseguró la convivencia de múltiples visiones de la vía bajo una estructura flexible, con el fin de que sus discípulos encontraran, cada uno, su propio camino dentro del martinismo.

Finalmente, Armand Toussaint abandonará este mundo el 4 de julio de 1994 a los 99 años. Su vida, fue la de un iniciado que entendió como nadie que todas las tradiciones conducen en su particular modo al centro, y que la clave se encuentra en profundizar en alguna, con libertad pero sin agregarle elementos ajenos que confundan su esencia. Con esta idea, le dejó al martinismo una forma de organización colectiva externa que lo dinamiza, favorece el intercambio y lo dota de libertad. Esta organización, revindica los orígenes, ya que remarca la importancia de la transmisión de maestro a discípulo, que es constitutiva del martinismo.



2 comentarios:

  1. Así es. hay q arriesgarse y ser un investigador práctico veraz. basta ya de refugiarse en experiencias de otros. Tener agallas para arrojarSe, darSe. hay tanto cuenterío q ya se es incapaz de ver la luz en el bosque d los errore...

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  2. Quien quiera adentrarse en el martinismo con seriedad, necesita investigar tanto en doctrina como en práctica. Primero porque aún hoy se siguen encontrando escritos de Saint-Martin, y segundo porque el martinismo fue víctima de un sincretismo que obliga al buscador a separar la paja de trigo constantemente. Toussaint fue un maestro que apoyo la búsqueda individual y nos legó los Libre Iniciadores, modalidad que rescata el espíritu de la vía original de maestro a discípulo sin depender de la superestructura al estilo masónico. Gracias por comentar.

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