“Pero, sin discutir las diferentes opiniones que reinaron sobre este asunto, podemos creer que el crimen del hombre fue haber abusado del conocimiento que tenía de la unión del principio del Universo con el Universo. No podemos dudar, que la privación de este conocimiento sea la verdadera pena de su crimen; ya que todos sufrimos este irrevocable castigo, por la ignorancia en la que estamos sobre los lazos que atan nuestro Ser intelectual a la materia.”
Louis-Claude de Saint-Martin – Tableau Naturel
La
lámina con la que se representa al sexto arcano en el tarot de
marsella nos muestras cuatro figuras: una mujer de aspecto grave, un
joven, una bella doncella y sobre ellos, por delante de un sol
radiante, cupido apuntando una de sus flechas. La interpretación más
difundida y aceptada de esta composición, es que el joven, que
representa al iniciado, debe elegir entre la mujer austera y sabia de
su derecha y la hermosa joven apasionada de su izquierda. Según esta
lógica, la carta representaría la elección entre la virtud y el
vicio, entre el conocimiento espiritual y los placeres del mundo
material, entre la belleza interior y la exterior. Sin embargo, a
pesar de que esta explicación puede resultar satisfactoria para la
mayoría, Saint Martin realiza un análisis de corte teosófico
y nos muestra algunos aspectos muy pocos conocidos de este arcano.